Mientras toleramos la charlatanería del Secretario General del Club, que no tiene el tupé de asumir un solo error, mientras nos hundimos en goleadas históricas con un equipo patético que no puede superar a un mediocre conjunto de Nacional B en la Sudamericana –porque estoy seguro que los uruguayos no son más que eso- el presidente cual De la Rúa, sigue encerrado a la espera del helicóptero.

Mientras el rojo pena en todos los lados con el peligro de la tabla de promedio, rifando su historia, desperdiciando chances.

Es que la situación es tan absurda que se permitió contratar refuerzos para ser suplentes. Esto es como ir al Super a comprar un producto que no voy a usar. O soy muy tonto, o me sobra la plata, o…

Encima, hasta en las situaciones más elementales cometemos errores. Alguien puede suponer a Tuzzio de doble cinco con 36 pirulos.

Es hora de actuar. Es necesaria una intervención urgente de Independiente. Sino la historia los condenará, y nosotros los hinchas deberemos padecer las consecuencias.

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