Al ritmo del dos por tres

No me preocupan tanto las dos pepas, en un contexto amistoso, en pleno laburo de pretemporada, como sí la propuesta de jugar con tres en el fondo. Lo probó Pedrito, casi con los mismos jugadores,y los recuerdos no son gratos. Lo probó el Bichi contra un tibio ataque azulgrana, y… Mejor, contra el tridente Boselli, Gata y Caldera no hacer pruebas, ¿no?
Digo, sobre todo teniendo en cuenta que falta tiempo de trabajo, y que en la Sudamericana el asunto es de ida y vuelta.

Además, a los 35 del primer tiempo ya estaban amonestados Herrón y Pusineri, porque las sensaciones de seguridad en el fondo eran meras sensaciones. Está claro, ¿no?

Otra cosa. A veces no entiendo. Me cansé de contar las pelotas que dio a los contrarios el Toti, y la cantidad de jugadas intrascendentes en las que participó Centurión. No tengo nada en contra de ambos. Mucho menos en contra de Ríos. Me pregunto –y dejo de lado la oportuna acción de los dirigentes de traer a estos dos refuerzos, y los insto a que lean en el diccionario el significado de la palabra refuerzo-, cuánto menos es Fredes, al que se lo recrimina constantemente y cuánto menos es Bruno, para que tengamos que erogar sumas cuantiosas. En fin…

Señores hay que mejorar y mucho. Basta de tres en el fondo, un esquema para el cual necesitamos centrales de selección y mucho tiempo de trabajo. Los centrales que tenemos son buenos, pero para jugar con 4. Por lo menos, por ahora.

Al Bichi, un entrenador muy interesante, en todo sentido, le pido que esta vez no arriesgue con tres y juegue con cuatro.

Foto: Infobae
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